Libertad Bajo Palabra

Antonio Attollini vino a Veracruz a hacer lo que mejor saber hacer, lamer suelas. Dice que Cuitláhuac García es un orgullo para Morena

Antonio Attollini en Xalapa FOTO: WEB

El oficio de Antonio Attollini, uno de los que se apropiaron del movimiento #YoSoy132, es lamer suelas; lo suyo es el vasallaje abyecto hacia aquel que le pueda lanzar una moneda o un mendrugo de pan político. Lo tuvieron de aviador en el IMSS y ahora cree que tiene méritos para ser secretario general de Morena, el partido que ni siquiera fundó y al que se montó como cuando vio que en las elecciones del 2018 se habría de encumbrar. Su retórica es falaz, su discurso es abyecto. Attollini estuvo en Veracruz. En Xalapa sólo causó cierta curiosidad a algunos compañeros de los medios; otros ya sabían que el oficio de Atollini es lamer suelas y pues eso ya no es noticia.

Pero en Veracruz lo entrevistaron y ahí se pasó una servilleta por la lengua y empezó a decir: «Tengo la mejor impresión del gran esfuerzo que está haciendo el ingeniero Cuitláhuac; después de haber sido gobernados por trúhanes como los Yunes, Fidel Herrera, Javier Duarte, de verdad que un hombre de esta empatía y sensibilidad social pues es un hombre del pueblo y está gobernando por el pueblo».

Obviamente Attollini pasa por alto que Cuitláhuac tiene meses en el sótano de las encuestas. Ignora Attollini la corrupción, el nepotismo, el subejercicio y el saqueo que se lleva a cabo en Veracruz. Pero igual no lo ignora, porque lo suyo, lo suyo es lamer suelas.