Pues resulta que nada más citó el presidente el tema del asesinato de Julio Valdivia en Tezonapa y de manera mágica las autoridades locales ya tienen indicios de una supuesta línea sólida de investigación. Ojalá y en verdad se dé con los responsables directos y se haga justicia y no sea una mera estrategia para levantarle el barco a la funcionaria encargada de la Fiscalía, quien no ha dado el ancho en ese puesto.
Y es que, el periodismo crítico en el estado de Veracruz se limita a unos cuantos periodistas y a varios reporteros valientes regados en algunos municipios. Muchos han sido comprados por el gobierno en turno y se encargan de destacar los supuestos avances de un gobierno que no sólo no protege a sus comunicadores, sino que sus funcionarios se encargan de amenazarlos cuando algo no les parece. También con ello tienen que lidiar los comunicadores en Veracruz.