Armando Ortiz / El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró el día 1 de julio los dos años de su triunfo electoral. Lo celebró a su manera, ponderando lo que él considera sus grandes logros, sus victorias íntimas, sus batallas ficticias en contra del nepotismo, el influyentismo y la corrupción. De acuerdo con la casa encuestadora GEA-ISA, el 58 por ciento de los mexicanos desaprueba la gestión del presidente López Obrador. Pero no sólo fue el nulo combate a la corrupción, al nepotismo, al influyentismo. La pandemia del coronavirus resultó ser una prueba no superada, pues ese 50 por ciento de los mexicanos se dieron cuenta del mal manejo de la crisis por parte del gobierno federal. La economía del país está en los suelos, y eso le duele mucho a las familias en casa. Aparte, la inseguridad sigue latente, porque la crisis de los grupos delictivos se refleja también en las calles. ¿Se acuerda usted de ese 80 por ciento de mexicanos que celebraba a López Obrador en los primeros meses de su gestión, cuando quitó la pensión a los presidentes y convirtió Los Pinos en un museo y prometió vender el avión presidencial? Pues de ese 80 por ciento ya sólo queda un 39 por ciento. Por supuesto, el presidente desdeñará esta encuesta, como todas en las que él no aparece como ganador. Sin embargo, esa actitud es la que lo ha colocado en el lugar que hoy, dos años después de su triunfo electoral, se merece.
FGR señala que sí hubo soborno millonario para liberar a “El Mochomo”; tienen grabaciones de llamadas intervenidas
Queda claro que la Fiscalía General de la República desconfía de los jueces que imparten justicia en el país. Si no, por qué la FGR, a través de la SEIDO, solicitó a un juez competente que le permitiera grabar a los individuos cercanos a José Ángel Casarrubias Salgado, alias “El Mochomo”, líder de Los Guerreros Unidos, señalado de ser el autor intelectual de la muerte de los 43 de Ayotzinapa. Así lo explica la autoridad: “La SEIDO, dependiente de la FGR, tiene autorizadas por un juez competente, intervenciones que señalan el cohecho por varios millones de pesos realizado por diversos individuos cercanos al imputado, a personal del juzgado referido, para que decretara la libertad de dicha persona; motivo por el cual, junto con otras razones legales, se obtuvo el arraigo de Ángel ‘C’”. Hay grabaciones en las que se habla de varios millones de pesos que se repartieron entre el grupo de jueces que dejaron en libertad a este delincuente. La cabeza de ese grupo es la jueza María del Socorro Castillo Sánchez, Juez Segundo de Distrito en Procesos Penales Federales de Toluca, quien el día miércoles 1 de julio dejó en libertad a “El Mochomo”. ¿Cuánto dinero ofreció el delincuente paras poder salir libre? ¿Con cuánto dinero se soborna a un juez en estos casos?
Saúl “El Canelo” Álvarez tampoco es médico, pero pregunta, ¿en qué puedo ayudar? #NoHayMedicina dicen doctores
La respuesta de Beatriz Gutiérrez Müller a una persona que le preguntó cuándo atenderían personalmente a los padres de niños con cáncer, causó mucha indignación entre los mexicanos. Sobre todo, por la ironía de la respuesta, «no soy médico, a lo mejor usted sí, ande ayúdelos». La respuesta ruda y poco empática de la “no primera dama” puso en evidencia lo que existe en su ánimo. ¿Cómo ayudar a los niños con cáncer si uno no es médico? ¿Se puede hacer algo o sólo los médicos? Saul “El Canelo” Álvarez, quien sabemos es pugilista, mas no médico, preguntó a la asociación “Nariz Roja” que pide medicamentos para niños con cáncer: «En que puedo ayudar? Hablen a mi oficina por favor con mucho gusto ayudo». La respuesta ha generado muchas simpatías hacia el boxeador, quien no puso como excusa no pertenecer a la profesión de los médicos, sino que antes que nada preguntó, ¿en qué puedo ayudar? La disposición y la empatía es lo que lo mueve, no su competencia o incompetencia en la medicina.
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