Héctor de Mauleón en su columna de El Universal relata que fueron al menos 39 sicarios los que participaron en el atentado en contra del secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México. En su relato el periodista especializado en temas de seguridad dice que ofrecieron a cada sicario hasta 100 mil pesos por participar y hacerse cargo de sus familias. Desde muy temprano iniciaron el operativo, pues se tienen detectados movimientos cerca de las 3 de la madrugada.
Mucho dinero se movió en este operativo, pues se adquirieron vehículos blindados, armas de grueso calibre incluidos cinco fusiles Barret y un lanzagranadas. Un detalle importante es que llevaban 51 bombas molotov, porque tenían planeado incendiar la camioneta de García Harfuch.
Uno de los escoltas del secretario recibió hasta 38 impactos de bala, sin embargo, no pudieron cumplir con su cometido pues la respuesta de la policía impidió que el ataque se consumara. Queda claro que García Harfuch afectó intereses muy grandes del Cártel Jalisco Nueva Generación, tan grandes que el grupo delictivo gastó millones de pesos para poder eliminar al secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, pero no lo logró.
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