Sergio González Levet / Cuando hay la percepción de que un gobierno no funciona, como sucede con los tres niveles que padecemos en Veracruz, resulta un garbanzo de a libra encontrar un área que funcione y realice bien y con ímpetu el trabajo encomendado.
Pero más refulge si esa área tiene que ver con la comunicación social, que es uno de los talones de Aquiles de los morrenistas siempre que han llegado a alguna instancia de poder.
La Cuarta Transformación olvidó las reglas de convivencia que se habían establecido a lo largo de los años entre el poder y la prensa, y el propio presidente Andrés Manuel López Obrador ha encabezado una campaña en contra de los medios y los periodistas mexicanos más importantes, a quienes acusa de estar relacionados con la oposición, como si eso fuera un delito.
He ahí una razón por la que el otrora importante trabajo que realizaban las oficinas de prensa de las dependencias oficiales ha pasado a mejor vida, y aquéllas se mantienen solamente para que sus jefes y sus directivos cobren un sueldo más o menos jugoso y tengan una oficina desde la que puedan entretener sus largas horas de ocio y hastío.
Por eso resulta muy destacado que la Coordinación de Comunicación Social de la LXV Legislatura de Veracruz produzca una cantidad notable de notas informativas y mantenga vigente el contacto profesional con los medios de comunicación estatales.
En menos de dos años de trabajo, han enviado casi 400 comunicados de prensa, que dan cuenta de las acciones de los diputados de todos los partidos. Es de notar en verdad el pluralismo y la inclusión con la que se maneja esa área del Congreso estatal, lo que es reconocido por los propios diputados de Morrena y por los extraños representantes populares de los otros partidos.
Aldo Valerio Zamudio es el titular de esa área sensible de la Legislatura veracruzana y desde que llegó se dispuso a reorganizar su oficina, de modo que cumpliera cabalmente con su función de difundir y dar a conocer el trabajo legislativo de todas las corrientes y partidos representados en la Legislatura local.
Se nota que el joven Valerio Zamudio tiene una buena cercanía con el diputado Juan Javier Gómez Casarín, Presidente de la Junta de Coordinación Política, y ha sabido interpretar sus indicaciones con el objetivo de que haya una comunicación permanente y fluida con los representantes de los medios de comunicación masiva.
Mientras en otras dependencias del Gobierno del Estado pierden el tiempo en actitudes contemplativas, en la coordinación del Congreso estatal han estado trabajando a marchas forzadas desde hace dos años para que los reporteros reciban la información necesaria que les permita difundir lo que están haciendo los diputados de la actual Legislatura.
Es así de fácil: la mejor grilla del mundo es el trabajo y dar resultados, y contra eso no podrán quienes buscan ascender peldaños por la vía de la infamia y la insidia.
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