Es por ello que en esta próxima visita del presidente López Obrador queda claro entre los veracruzanos que cuando el señor presidente llama honesto a Cuitláhuac García, es como si nos escupiera en la cara; si lo llama una bendición para Veracruz, es como si nos estuviera mentando la madre. ¿Acaso no se da cuenta el presidente de los sondeos de las diferentes casas encuestadoras en donde el gobernador de Veracruz se encuentra siempre en los lugares más bajos? ¿Acaso no se da cuenta de las denuncias que pesan sobre la cabeza de varios de sus funcionarios?
Los veracruzanos están muy molestos pues esperaban un gobierno diferente, pero la Curta Transformación fue capaz de poner a hermanos, primos, chichifos, delincuentes y hasta strippers a gobernar Veracruz. Señor presidente, no venga a decirnos que estamos benditos. Si viene usted a mentarnos la madre, mejor no venga.