Bernardo Gutiérrez Parra / Si los diputados de Morena pensaban que las reformas que pretenden hacerle a la Constitución local serían algo así como coser y cantar tomando en cuenta que prácticamente no tienen oposición, están muy equivocados.
Lo que los señores y señoras de Morena proyectan, entre otras cosas, es instaurar el voto electrónico, anular la consulta ciudadana que pondría en riesgo la continuidad de los servidores públicos electos vía el voto (como el gobernador, por ejemplo) y modificar estructuralmente al OPLE, así como a sus consejos distritales y municipales.
Como son mayoría quieren irse por la libre, pero así no se legisla.
El primero en manifestar su desacuerdo fue el líder estatal del PRI Marlon Ramírez, que el 5 de mayo dijo que su partido presentaría una acción de inconstitucionalidad para que se realice la consulta de revocación del mandato en Veracruz. Y en tono irónico agregó: “Defenderemos el derecho del Gobernador (Cuitláhuac García) a perder la consulta ciudadana en 2022”.
Pero este lunes los dirigentes nacionales y estatales del PAN, PRI y PRD formaron un frente común para oponerse a las medidas de los legisladores morenos.
“Veracruz se ubica en el tercer lugar nacional en casos confirmados de Covid-19, y aun así, en medio de toda esta emergencia sanitaria y económica, el sábado 2 de mayo en sesión ordinaria del Congreso Local, fue presentada por la fracción legislativa de Morena, una reforma electoral conteniendo temas solamente discutidos y analizados hacia el interior de dicha fracción, que no hacen más que reflejar la verdadera intención del partido en el poder federal y estatal, que es la de dinamitar la estructura democrática y de representación mediante la cual accedieron al poder e indudablemente buscan proteger al titular del Ejecutivo Estatal”, dice una parte sustantiva del desplegado enviado al pueblo de Veracruz.
¿Qué pretenden los morenos con estas reformas? Por principio de cuentas y como ya es bien sabido, blindar a su gobernador que disminuido como está políticamente, no aguantará una consulta popular que derivaría en la revocación de su mandato. Y después, seguir socavando a las instituciones. Ya lo hicieron con el Tribunal Superior de Justicia del Estado, con la Fiscalía General, con el mismo Congreso y ahora van contra el OPLE.
Este lunes y en entrevista radial, Marlon Ramírez dijo que no se puede hacer una reforma constitucional a modo, sobre las rodillas y de tal calado, sin mayor discusión que la de veintiocho personas que integran el grupo legislativo que la propone, es decir, los diputados de Morena.
Y no perdió la oportunidad de lanzar una advertencia a esos legisladores: “No pueden ser tan prepotentes como para pensar que porque ganaron una elección tienen derecho a modificar la Constitución a su gusto. Esto me parece de una soberbia impresionante. A nosotros cuando fuimos gobierno ese tipo de soberbia nos llevó al lugar donde estamos. Que sigan como van, pensando que se convirtieron en dueños de la voluntad popular. En el 2021 nos vamos a volver a ver las caras”.
¿Qué va a pasar? “Nada, no va a pasar nada. Los tres partidos son poca cosa para Morena, son muy poquitos. Están muy devaluados y no van a salir del hoyo. De veras, no nos van a hacer nada, no tienen con qué. Morena llegó para quedarse”, me dijo vía telefónica un legislador de ese partido. Pero quizá los subestima; cuando dijo ‘son muy poquitos’ recordé que ningún gran movimiento empieza o empezó con una multitud.
En noviembre de 1910 Francisco I. Madero comenzó su revolución con dos docenas de soldados tan desarrapados y mal armados que hasta don Porfirio se mofó de él. Pero meses después el viejo dictador salió del país para no volver.
En estos tiempos y cada uno por su lado, el PAN el PRI y el PRD tienen poco que oponer al partido en el poder, pero juntos pueden ser dinamita y no hay que desdeñarlos.
Por lo pronto, mayo es el mes en que Morena se topó de frente con un bloque opositor con el que no contaba y que se ha propuesto hacerle la vida de cuadritos si pretende pasarse la Constitución por el forro.
Habrá que estar atentos a lo que viene.
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