Albazo legislativo para evitar la caída de Cuitláhuac

Cuitláhuac García Jiménez FOTO: WEB
- en Opinión

Edgar Hernández* / 

¡Vota el Congreso contra de la consulta popular para impedir la revocación del mandato!

El miedo no anda en burro.

A la vuelta de 18 meses del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, colocado entre los peores gobernadores de la república, rechaza la consulta pública y para atajar la remoción recurre a lo que siempre combatieron él y sus huestes, el mayoriteo legislativo.

Cuitláhuac bien sabe del rechazo ciudadano.

No ignora que no sabe cómo se gobierna y que no puede ni está apto para conducir a la tercera entidad más productiva y poblada de México, ya que lo suyo son las fiestas, la lucha en las calles en defensa de sus banderas, y el recorrer pueblos y ciudades promoviendo el voto.

Desdeña además, por supervivencia política, el mandato de la 4T y los principios de lucha de Andrés Manuel López Obrador, de ir a la consulta pública a la mitad del mandato para la revocación o ratificación de su gobierno.

Cuitláhuac sabe que si entra en ese camino sin retorno tendría que irse a su casa en el 2022.

Por ello acude a su escudero Juan Javier Gómez Cazarín, un joven transa que bien le sabe a la compra venta de autos usados que es a lo que se dedicaba hasta hace año y medio y a andar maloreando a la gente pudiente y trabajadora, más que legislar.

El desgarbado diputado es un burlón alburero que cree que puede llegar a la gubernatura arrodillándose al “Tlatoani” Cuitláhuac poniéndose de hinojos y con él arrastrar al Poder Legislativo como lo hizo en meses recientes al imponer a improvisados y de mala fama como los titulares del Poder Judicial, Sofía Martínez Huerta y la responsable de ORFIS, Delia González Cobos, ambas sin carrera ni experiencia.

Igualmente la semana siguiente seremos testigos de la imposición a modo de la nueva Fiscal General de Veracruz, Verónica Hernández, nombramiento que recaerá en Verónica Hernández, ligada familiarmente al crimen organizado.

¿Es así como se gobierna?

Y es que cuando pensábamos que las viejas prácticas del autoritarismo habían llegado a su fin. Cuando estábamos ciertos que los “buenos” habían llegado para poner las cosas en orden y hacernos justicia –¡Yo ya tengo un par de zapatos!-. Cuando, por fin, pensábamos que no habría más raterías, ni nepotismo, ni compadrazgos, que llega Cuitláhuac con su caterva de golfos.

¡Vaya desilusión!

Encontrarnos con que un gobernante habla con faltas de ortografía, que no sabe cómo llevar una entidad de más de 8 millones 200 mil habitantes con 130 mil millones de pesos de presupuesto y que encima de todo quiere quedarse a fuerzas lo que resta del sexenio… pues sí que está cabrón.

Este martes la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, que encabeza Gómez Cazarín, sin tener la facultad legales para imponer cambios constitucionales y sin el concurso de la mayoría legislativa concluye el compromiso de cumplir con la aprobación del paquete de la Reforma Electoral.

¡Bravo!.., le dirá Cuitláhuac. “Te lo aprecio y mínimo te vas el año próximo de alcalde de Coatzacoalcos…”

Así, al rechazo legislativo a la revocación del mandato del gobernador se suma la reducción de periodos de alcaldes, la eliminación de Consejos Municipales y disminución del financiamiento a los partidos políticos.

Morena, sin embargo, se llevará la tajada del león debido al porcentaje electoral alcanzado en la última elección que lo coloca en primer lugar en prerrogativas.

Da lugar asimismo a un hecho histórico, a que la oposición partidista PAN, PRI y PRD se sumen y acudan a los tribunales en busca de apoyo legal ya que no es posible, señala el dirigente priista Marlon Ramírez “que Morena busque hacer trajes a la medida en materia electoral, lo cual es indolente y mezquino”.

En los hechos la oposición partidaria está unida y es mayor al dominio de Morena. Es decir, de cara a una elección el PAN, PRI y el PRD sumarían más votos que el 1.6 millones que alcanzó Cuitláhuac en 2018 gracias al “Efecto Peje”.

Así que el poco aceptado gobernador, a quien las chinampinas le brincan por todos lados, o se va por las buenas o antes de que finalice el año cuando las cuentas le sigan siendo adversas y su popularidad sigue en picada –el marzo fue el peor de los 32 gobernadores y en abril ocupa el lugar 27, según la encuesta ciudadana de “Arias Consultores”- tenga que irse por las malas por mandato del centro.

Por lo pronto este martes 12 de mayo todo es grilla.

Cuando se debería de estar legislando para coadyuvar a aliviar la pandemia o que los diputados y la alta burocracia redujeran sus salarios en favor de los desposeídos, andan de quedabien con el rey desnudo.

Ya se percibe, sin embargo, que hay rebelión en la granja.

Tiempo al tiempo.

 

*Premio Nacional de Periodismo

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