En una sucursal Walmart de Alabama, Estados Unidos, dos mujeres ingresaban al supermercado para realizar sus compras; al parecer las mujeres iban a comprar cervezas para seguir en la fiesta. Rod Mauldin, el guardia de seguridad al ver que las mujeres ingresaban sin cubrebocas se dirigió a ellas para decirles que si querían ingresar tenían que llevar cubrebocas. Una de ellas, cuando escuchó que no podían entrar sin cubrebocas se alteró, «se volvió errática y problemática», señaló el guardia.
De acuerdo con los testigos del lugar, el guardia de seguridad le pidió amablemente que se colocara un cubrebocas, pero la mujer le respondió con ofensas al empleado y continuó su camino hacia la tienda. El guardia la siguió y le pidió que se saliera, pero al volver a negarse intentó esposarla, pero la mujer se resistió al arresto.
Después de resistirse al arresto se puede ver al guardia de seguridad que le pone las esposas la levanta y la azota contra el suelo mientras la mantiene sometida. Muchos dijeron que el guardia puso mucha fuerza en el arresto, pero otros dijeron que la mujer lo merecía ya que se le había hablado con palabras y respeto, pero ella no quiso entender.
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