A los medios que no comulgan con él, no los baja de chayoteros o de prensa fifí, a los empresarios que no están de acuerdo a sus ideas, son identificados como conservadores. Sus misiles no sólo tienen objetivos nacionales, también enfocó su objetivo contra el Banco Interamericano, ya que no le gustan “los moditos” de éste. Es cierto que ha habido intentos de hacer bien las cosas, como el ataque a la corrupción, sin embargo, lesiona mucho la credibilidad de la Cuarta Transformación cuando vemos cómo se le consiente a Salinas Pliego en el pago de sus impuestos o como se le da a manos llenas los contratos sin licitar al hijo de Manuel Bartlett.
Además, no es un secreto que los gobernadores emanados de Morena en sus respectivos estados, les crecieron las uñas, nada más tomaron el poder. Ahí están los casos de Morelos y Veracruz, donde los Ejecutivos estatales se están hinchando de dinero. Esa es la famosa Cuarta Transformación.