Dice Elizaa Ortega Acosta que Guadalupe Argüelles es «una persona que afronta cada prueba que la vida le pone con sabiduría, dignidad e inteligencia! Una mujer de palabra, comprometida con su trabajo y con su gente! Sabemos que hizo de su trabajo el mejor y con los mejores resultados, y que ahora la esperan cosas mejores!!!». Guadalupe Argüelles renunció a la Secretaría del Trabajo una vez que se diera a luz que su hijo paseaba ebrio con unos amigos en un auto oficial de esa secretaria; entre las botellas de cerveza que llevaba el grupito de jóvenes, encontraron hierba que se presume es mariguana.
Algunos de los comentarios son coleccionables: «Una gran mujer con un gran corazón que ah sabido ganarse su lugar luchando. Dicen que cuando Dios te quita algo es por que te tiene algo mejor, y así debe de ser ella se lo merece por su arduo trabajo. Adelante Lic. Lupita siga como hasta ahora luchando y con la frente en alto con esto sólo demuestra que es una guerrera pero antes que nada es madre» (sic).
Bueno, ¿acaso esta gente no se enteró que la exfuncionaria pretendió poner a su propia hija en un puesto importante en la dependencia a su cargo; acaso esta gente no se enteró que Lupita fue con el marido a madrear militantes de Morena en Tantoyuca; acaso está gente no se enteró que el hijo de esta mujer se paseaba con droga en un auto oficial? ¿De dónde sacan que es una gran mujer, que tiene un gran corazón?
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