Los municipios son libres, eso está muy claro en la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, en el artículo 115. El gobernador, siendo el poder Ejecutivo del estado, no tiene facultades para sancionar a los alcaldes de los ayuntamientos, mucho menos lo puede hacer el secretario de Gobierno. En todo caso, si se tuviera que hacer, sería el poder Judicial el que podría iniciar un procedimiento en contra de algún alcalde. Hasta el Congreso del Estado lo podría hacer; en el sexenio de Cuitláhuac García ya ha desaforado alcaldes y hasta síndicos.
Entonces, ¿por qué el boletín que emite la oficina de prensa de la Secretaría de Gobierno de Veracruz, se atreve a poner «Sancionaremos a alcaldes irresponsables», todo en primera persona del plural. Es decir, él, Bola 8, su Secretaría y su albedrío arbitrario son los que van a sancionar a alcaldes. ¿Qué sanciones aplicará el Bola 8? Pues las que le dicte su albedrío, las que le dicte su arbitrariedad.
Eric Cisneros sabe que él puede disponer tanto del poder Judicial como del poder Legislativo, así como de la Fiscalía General del Estado, y eso porque los dos poderes se lo han permitido. En el caso de la fiscal espuria, ella simplemente es su edecán. El único que podría poner en su lugar al Bola 8 es el gobernador Cuitláhuac García. Pero Cuitláhuac García está muy ocupado en ver que no le toquen a su favorito Zenyazen Escobar, secretario de Educación, que está hundido en el estiércol de la corrupción.
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