JB acusa a titular de IMSS que atacó a Derbez
Carlos Jesús Rodríguez Rodríguez / AUNQUE LOS ataques no se hacen esperar cada vez que se aborda la incompetencia del Secretario de Salud Estatal, Roberto Ramos Alor, un médico aldeano que de buenas a primeras fue impuesto en el máximo escalón de la medicina en el Estado por la ahora Secretaria de Energía, Roció Nahle, lo cierto es que el desempeño de la dependencia a su cargo ha dejado mucho que desear durante esta Pandemia de Coronavirus, a tal grado que Veracruz –y su Gobernador Cuitláhuac García Jiménez- forma parte de ese grupo que poco o nada han hecho para contener la expansión de la enfermedad que sigue cobrando víctimas, peor aún con la actitud rupestre de Eric Patrocinio Cisneros Burgos, el Secretario de Gobierno que en aras de llevar la contraria a alcaldes emanados de otros partidos –distintos a MoReNa- se opone al cierre de playas, aun cuando el propio Presidente Andrés Manuel López Obrador y el subsecretario de Salud Federal, Hugo Lopez-Gattel lo han demandado para evitar la propagación de contagios. Contrario a los nefastos gobernantes y sus titulares de área, por fortuna hay 16 Gobernadores que han llevado a cabo mejores acciones que el Presidente Andrés Manuel López Obrador para enfrentar la pandemia, y de acuerdo a la reciente encuesta de Caudae Estrategias, el de Yucatán, Mauricio Vila es quien encabeza la lista de los que han enfrentado mejor la emergencia sanitaria con un 45.6 por ciento aceptación, en contraste con el 34.2 por ciento que opina que las medidas de AMLO son mejores. A Vila le sigue el mandatario panista, Francisco Domínguez, de Querétaro, con un 45.1 por ciento; Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), con 44.4 por ciento. Siguen en la lista Carlos Mendoza Davis, de Baja California Sur, con 44.2 por ciento; y el mandatario de Durango, José Rosas Aispuro, con 43.6 por ciento, y se suman al grupo de gobernadores actúan de mejor manera que el Gobierno de México frente al CoVid19: Sinaloa, Coahuila, Guanajuato, Jalisco, Tamaulipas, San Luis Potosí, Quintana Roo, Baja California, Chihuahua, Aguascalientes y Nuevo León.
LOS QUE de plano reprueban en la valoración de sus propios gobernados, pues consideran que el presidente López Obrador ha actuado mejor, son: el mandatario de Tabasco que solo tiene 41 por ciento de aprobación; Hidalgo con 39.4 por ciento; Veracruz, 39.2 por ciento; Morelos, 39.3 por ciento y Estado de México con 39 por ciento, y le siguen Campeche, Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Zacatecas, Nayarit, Colima, Tlaxcala y Puebla. En Sonora hay un empate entre AMLO y la gobernadora Claudia Pavlovich y en Michoacán, de plano creen que ninguno de los dos gobiernos ha respondido adecuadamente, y no les falta razón. En México había hasta el domingo 4 mil 661 personas que dieron positivo a la enfermedad con un incremento de 442 por ciento respecto al día anterior, mientras que el número de decesos llegó a 296, esto es, 23 más que el día previo, mientras que en Veracruz el número de positivos es de 79 y tres personas fallecidas, (34 mujeres y 45 hombres) lo que indica que los contagios van al alza, y que difícilmente podrá levantarse la cuarentena el 10 de Mayo como insinúa el Presidente López Obrador.
Y ES que la situación se advierte tan grave para las próximas semanas o meses, que el Jefe de las Instituciones Federales ha celebrado que los propietarios de hospitales privados de México –antaño despreciados por el mandatario y acusados de abusadores- ofrezcan sus instalaciones para que formen parte de la estrategia de su gobierno en la lucha contra el Covid-19, reconociendo paralelamente que el sistema de salud del Estado es deficiente, pero al igual que sus antecesores prefirió invertir en obras superfluas –que no han sido detenidas pese a la contingencia- como el Tren Maya, el Aeropuerto de Santa Lucia y la refinería de Dos Bocas en Paraíso, Tabasco, sin olvidar el corredor transístmico, infraestructuras que pudieron esperar, pero que AMLO las considera más importantes aun que la propia salud de los mexicanos que, como ya está visto, no encuentran atención en muchos casos, lo que ha derivado en choques con directivos de nosocomios oficiales que ya se encuentran saturados y sin insumos, pero que los adoradores del Presidente desmienten, como es el caso denunciado por el comediante Eugenio Derbez que advirtió que en la clínica 20 de Baja California hay carencia de todo, y que los médicos y enfermeras están expuestos al contagio al no contar con lo elemental. La acusación motivó que la doctora Desirée Sagarnaga desmintiera al actor y le recomendara no difundir fake news. En un video que compartió en sus redes sociales, la médico –con 30 años de servicio en el Seguro Social- aseguró que no hay carencias en el hospital de Tijuana para enfrentar el coronavirus, como aseguró Derbez –con base en la denuncia de un supuesto trabajador–. “Su información es falsa, le quiero pedir un favor, no difunda noticias falsas, nuestro tiempo está dedicado a salvar vidas y hacer este mensaje, pues me está tomando el tiempo que tendría que estar usando para pacientes que lo necesitan, que me necesitan”, peor aún, dijo que en el Hospital 20 “y en todo el Instituto no labora actualmente ningún doctor con el nombre que usted refiere”.
PERO EL Gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, reconoció que la denuncia de Eugenio Derbez, a quien se refirió como “esta personalidad”, es cierta, “no dijo realmente mentiras”. Jaime Bonilla dijo que la delegada del IMSS, la que respondió a Derbez, ni siquiera ha ido a la Clínica 20 del IMSS. “El seguro social en Baja California no se aplicó y esa es la razón por la que hay carencias de insumos y material médico”, mientras que el doctor Faustino Ruvalcaba, de quien la delegada del IMSS declaró que no existía, dio la cara y dijo que sí, que pidió apoyo a Derbez por la situación que se estaba viviendo en los hospitales de Tijuana.
SIN DUDA, los defensores a ultranza de López Obrador se han convertido en los peores enemigos del “pueblo bueno”, ya que en aras de tapar los yerros soslayan las necesidades más apremiantes en los hospitales poniendo en peligro a las personas de menores recursos que más lo necesitan. Son tan rastreros que nos les importa que muera la gente con tal de que no se critique a su Mesías que, por otra parte, ya insinúa en levantar la cuarentena el próximo 10 de Mayo, usando nuevamente el sentimiento de los mexicanos por las mamás. Como fuera, la situación en México será catastrófica para cuando acabe la Pandemia, aunque ya es desastrosa en materia de salud, y todo porque López Obrador prefiere invertir en lo superfluo –como lo hacían los Gobiernos conservadores que tanto critica- en lugar de aplicar más dinero al sector salud. AMLO pudo pasar a la historia como el Presidente de la Salud, pero prefirió hacerlo como el mandatario ferrocarrilero, aviador o petrolero. Así de simple. OPINA [email protected]
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