¡Ay Bingen, eres tan bueno y caritativo que los pobres del puerto de Veracruz te van a canonizar! Habría que recordarle al diputado fifí que la máxima bíblica dice: «Más bien, cuando le des ayuda a un necesitado, que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu mano derecha; así la ayuda que les des a los necesitados se mantendrá en secreto. Y entonces tu Padre, que mira en secreto, te lo pagará».
Pero Bingen Rementería tiene que publicar sus actos de caridad porque lo que en realidad está haciendo es campaña pues aspira a ser el próximo alcalde del puerto de Veracruz. A eso se le llama ser oportunista, un sujeto cínico que pretende lucrar políticamente con la necesidad de los veracruzanos.