Veracruz ocupa el primer lugar en adeudos al ISSSTE, se sabe que deben más de 12 mil millones de pesos. También va a la cabeza en feminicidios en el país, según algunos analistas señalan que un asesinato diario ocurre en territorio veracruzano. Y, por si fuera poco, en el ámbito de salud las cuentas arrojan que Veracruz ocupa el primer lugar en casos de Sida, al menos esta semana alcanzó la cifra de 60 casos.
Además, las inversiones están detenidas en ciudades como Coatzacoalcos, los empresarios prefieren cerrar y migrar y algunos comerciantes que se han quedado a trabajar, han sido víctimas de cortinazos. Todas estas circunstancias van enmarcadas en un clima de violencia, donde tal pareciera que los grupos delincuenciales van ganando.
Desgraciadamente, el territorio veracruzano ha dejado de recibir turistas que venían a provocar una buena derrama económica, las habitaciones vacías en medio del Carnaval sirven para dejar constancia que en el estado de Veracruz algo está fallando.
Sin embargo, para el gobernador, no pasa absolutamente nada. Para el Ejecutivo estatal, Veracruz es un paraíso donde los inversionistas hacen fila para venir a invertir y los turistas se quejan porque no hay hoteles donde hospedarse. ¡Vaya visión tan deforme!
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