El candidato Andrés Manuel López Obrador prometió que durante su gestión como presidente habría crecimiento económico, pues al no haber corrupción en su gobierno, México iba a crecer como nunca había sucedido. Pero no, antes que crecimiento económico ha habido decrecimiento. El Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) dio conocer el dato de que el Producto Interno Bruto del país había tenido una caída del 0.1 por ciento, lo que significa que no hubo crecimiento, sino todo lo contrario.
Sin embargo, el mismo hombre que juro que sin corrupción en su gobierno iba a haber más crecimiento, ahora salió a decir: «como tengo otros datos puedo decirles que hay bienestar, puede ser que no se tenga crecimiento, pero hay desarrollo y hay bienestar, que son distintos». ¿Qué es lo que está pasando en el gobierno? ¿Es que acaso sigue la corrupción y por eso no hay crecimiento? Porque para Andrés Manuel López Obrador esa era la razón por la que no había crecimiento.
Ahora que está a punto de cornearlo el toro de la incongruencia, el presidente de México redefine “crecimiento”: «Crecer puede significar que haya más dinero en unas cuántas manos, en el periodo neoliberal ni siquiera hubo crecimiento, pero lo poco que hubo se acumuló en unas cuantas manos». Así, con esa labia, el cree que el toro de la incongruencia jamás lo va a cornear; no sabe que ya está bien ensartado.
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