La lista comienza con Dorheny García Cayetano, a quien la iglesia católica considera como “diputada de la muerte”, por haber votado la iniciativa que apoya el aborto; ella llegó a ser diputada federal por suerte de la bendita tómbola de Morena. La otra es Rosalinda Galindo Silva, diputada local por Xalapa Urbano, la misma que colocó a toda su familia en nómina. «La familia entera cobra en total 365 mil pesos mensuales», afirmó en su momento este medio.
Y la otra consentida del Cuic es nada más y nada menos que Ana Miriam Ferráez Centeno, la misma que pidió toque de queda para las mujeres en la capital del estado y que cada vez que pasa a la tribuna, se hace bolas con las palabras. En otras palabras, de las tres no se hace una. Por cierto, el que también quiere meterse en la sucesión municipal es el propio secretario de Gobierno, Éric Cisneros, apoyando a la encargada de la fiscalía, Verónica Hernández Giadans, quien ni fu ni fa en el puesto que ostenta. Ni hablar, de verdad que la caballada esta flaca en la lista del Cuic.