Según el relato de López Obrador, él había quedado de verse en la cafetería de Gandhi con una persona. De repente un cliente se le acercó y le dio un libro, el mandatario lo tomó pensando que la persona que le dio el libro se lo había regalado, pero no. Tiempo después la cita de AMLO nunca llegó y sin más se enfiló a la salida, pero, un empleado se le acercó y le pidió el ticket de compra del libro, Andrés Manuel López Obrador le explicó al trabajador que alguien se lo había regalado, pero el trabajador no le creyó y le pidió que lo pagara y sin discutir por ver quien tenía la razón AMLO regresó el libro y se fue.
“Me salí con el libro en la mano. Entonces, me detuvieron, me pidieron que presentara la nota. Les dije me lo acaban de dar, me lo regalaron. ‘No pues no lo puede usted sacar’ (dijeron). ‘No, pues ahí está’, y ya me fui” dijo el tabasqueño. A la siguiente semana el presidente volvió a la librería y el gerente le pidió una disculpa por el malentendido y le regaló la Historia de México de Fernando Benítez. “No saben cuánto me sirvieron esos libros (…) Me puse a leer los 10 tomos. Se los recomiendo porque son extraordinarios”, finalizó el mandatario federal. Habría que señalar que, en el caso del embajador, claro se ve como éste trata de ocultar el libro que se está robando, no hubo tal confusión y mucho menos un error.