En ese momento hay un altercado, pues el policía le devuelve el celular y Heliodoro responde violentamente, “a mí me pelan la verga” dice a los policías, quienes lo bajan de su camioneta y lo esposan. Después de que el acompañante tranquiliza a Heliodoro Treviño, se lo llevan a los separos de la policía municipal de Apodaca, donde sólo está tres horas y paga una multa por una falta administrativa.
En redes sociales los usuarios reprueban la prepotencia del exalcalde de Salinas, Victoria, así como la manera como pretendía arreglar el problema de ir conduciendo en estado de ebriedad, llamando a un amigo funcionario, Víctor Navarro, secretario de Seguridad de Apodaca para que lo libre de el problema. También celebran la valentía del policía que no se amedrentó ante las amenazas del ebrio Heliodoro Treviño.