Restaurantes La Gorda se deslinda de agresiones de su socio; pero no puede evitar ni el boicot ni el buleo

En serio, hay personas que siguen sin entender el poder de las redes sociales. Después de que se hiciera viral la agresión de Daniel Gutiérrez Rodríguez, mejor conocido como #LordCafé, a una joven que le pedía disculpas por el percance automovilístico que tuvieron, los usuarios de Twitter empezaron a bulear la cuenta de Twitter de Restaurante La Gorda (@RestLaGorda).

En su cuenta de Twitter Restaurante La Gorda invita a su martes de #EspecialesLaGorda a lo que los usuarios le responden: «¿Y si no me gustan las enjitomatas me va a madrear el dueño?»; «Puedo pedir quesadillas sin queso y sin que me pateen y me avienten el café?»; «Las enjitomatadas incluyen patear la puerta del auto?»; «Quiero un café en la cara y 3 putazos a mí auto porfa. En cuánto sale el combo?».

Al parecer las acciones de una persona déspota y prepotente tiene sus consecuencias, porque ya sea que sea socio o dueño de la franquicia, LordCafé ya afectó a empleados, socios y proveedores. Entre los usuarios de Twitter hay quienes le proponen una salida: «La única manera que veo que este negocio sobreviva es que #LordCafé de una disculpa pública y endosar el Mercedes a la afectada». Otros señalan: «Por como veo el pedo, ‘La Gorda’ va a enflacar muchísimo».