La incongruencia de la Cuarta Transformación; la sucia conveniencia de un gobierno que protege a sus vasallos, pero que sacrifica a sus peones. El mismo secretario de Gobierno, Éric Cisneros, para presumir que está en contra del acoso contra las mujeres, anunció la detención de Rafael “N”, quien fuera secretario particular de María del Rocío Pérez Pérez, secretaria del Medio Ambiente. Rafael “N” tienen denuncias por acoso de parte de una trabajadora de esa dependencia. La primera denuncia fue en diciembre de 2018, es decir, apenas llegó el angelito y se puso a pedir “derecho de pernada”. Otra denuncia se hizo en mayo de 2019.
Tardaron en echarlo, en aprehenderlo, antes bien aprovecharon la coyuntura de la comparecencia del secretario de Gobierno para hacerse los justicieros. Pero, ¿qué hay de Carlos Quiroz, secretario técnico del Sistema Anticorrupción de Veracruz. El académico de la Universidad Veracruzana tiene una denuncia ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y una denuncia en la Fiscalía General del Estado cuya titular es “empleada” del Bola 8.
La denuncia contra Carlos Quiroz está en la carpeta número 2541/2019 en la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia contra la Familia, Mujeres, Niñas, Niños y Trata de Personas. Pero a Quiroz nadie lo detuvo, nadie lo llamó a cuentas, a pesar de que la denuncia ya está ratificada por la quejosa y está en curso la integración de peritajes. Esta es la incongruencia de un gobierno que pregona honestidad, pero son como esos sepulcros blanqueados por fuera, pero que por dentro están llenos de huesos e inmundicia.
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