El problema es que por tatuarse los ojos la joven se quedó ciega por dos semanas y padeció, durante la operación, dolores indecibles. «Ni siquiera puedo describir cómo fue la sensación, lo que puedo decirles es que una vez que el globo ocular fue penetrado con la tinta, sentí que agarraron fragmentos de vidrio y lo frotaron en mis ojos», comentó la joven en sus redes sociales.
Por supuesto, se espera que esa modificación extrema tenga secuelas, pues lo que hace es ir en contra de la naturaleza. Amber Luke, la bad influencer, espera tatuarse todo el cuerpo. Su madre explicó a un medio informativo que desde los 14 años ella sufrió de una fuerte depresión que la llevó a rechazar su aspecto, su propio cuerpo. Por ello lo modifica, porque no le gusta lo que es. ¿Es Amber Luke digna de imitar?