Rosalinda González Valencia conoció a Nemesio Oseguera Cervantes, su actual esposo, antes de que se convirtiera en el capo más buscado por los gobiernos de los Estados Unidos y México. Pero la mujer vivió y se involucró en el tráfico de las drogas desde su infancia, ya que su padre el patriarca de Los Cuinis, Armando Valencia Cornelio El Maradona fue uno de los fundadores del Cártel del Milenio.
Durante varios años La Jefa más loca vivió en una de las zonas residenciales más lujosas de Guadalajara sin ser molestada por las autoridades, a pesar de que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos la señaló, junto a sus hermanas María Elena, Érika, Berenice, María Ivette y Noemí, de ser responsables en el trasiego de drogas a ese país.
Al llegar al Cártel Jalisco Nueva Generación y después de casarse con Rosalinda, El Mencho fue el foco de atención de todas las corporaciones de seguridad. Siempre fue un blanco difícil de atrapar, un sujeto sumamente inteligente de tal grado que se hizo la cabecilla del cártel. Ahora entre los dos lideran esa organización delictiva, el CJNG la cual está creciendo de tal manera que parece no hay de detenerlos.