El actor, para poder perder tanto peso, se tuvo que someter a una dieta muy peligroso para todo aquel que la practique. «Haces lo que es necesario para interpretar el personaje. Ya he pasado antes por el proceso (de pérdida de peso), por lo que sabes exactamente qué esperar. Aunque quizá por ese mismo motivo le tienes más miedo. La primera vez que perdí mucho peso fue extremadamente difícil y no sabía realmente lo que estaba haciendo», dijo en una entrevista para el Inquirer.
«No solo me alimentaba con una manzana al día. También tomaba otros vegetales como lechuga y judías verdes al vapor. En todo momento estaba controlado y dentro de parámetros saludables», finalizo Joaquin Phoenix. Vale señalar que un proceso parecido llevó a cabo el actor Tom Hanks para la película Naufrago, sólo que en su caso tuvo graves consecuencias, terminó diabético. Esperemos que a Joaquin Phoenix esa brutal pérdida de peso no tenga consecuencias.