Salvador Muñoz / En el IMSS, una señora llega muy lastimada de su brazo… en la avenida Murillo Vidal de la capital veracruzana, le roban y para despojarla de su bolso, es arrojada con violencia al pavimento…
Hace unos días, familiares de dos empresarios, prestadores de servicios en administraciones estatales y fundadores de una organización contra la corrupción de la capital veracruzana, fueron atracados en su casa. La víctima, su hermana y el esposo que viven en la zona de Coatepec, precisamente donde hace unos días la delincuencia cobrara una víctima más con la señora Nora, familiar del dueño del restaurante “Tío Yeyo”. Desconozco si la familiar de estos empresarios haya puesto denuncia aunque lo más seguro es que no, porque si hubiera sido así, ya lo hubieran hecho público.
En Xalapa, reconocido doctor ubicado en una torre de esta ciudad, cuando llegaba a su domicilio, los delincuentes aprovecharon la apertura del garaje para introducirse y saquearlo…
No sé ustedes, pero estos lamentables hechos me generan más incertidumbre y miedo porque implica que si las calles eran consideradas como inseguras, ahora, ni en tu propia casa puedes estar protegido.
Sin embargo, el hecho que más me sacudió, fue uno ocurrido en Coatzacoalcos. La joven salió a correr por la mañana en el bulevar… una camioneta se le emparejó; de ella descendieron varios hombres que la subieron a la fuerza y allí, inició la pesadilla… todo el día fue violada. Al caer la noche, a orilla de carretera, la hicieron descender. En un descuido, corrió y se perdió en la oscuridad y pantanos. No sabía si la iban a matar o no, pero huyó. Horas más tarde, hizo “stop” a un taxi que la auxilió… permaneció un mes casi en “estado de coma” por la depresión.
Les platico esto, porque en la mañana del martes, escuchaba el debate que hay entre los senadores del PAN y Morena con su dichosa desaparición de poderes en Veracruz, Guanajuato y Tamaulipas.
Ambos representantes del Senado esgrimen muchas razones para actuar de este modo, entre ellas el tema de la inseguridad en el caso de Guanajuato y Tamaulipas; en lo que respecta a Veracruz, se habla del contubernio entre Poder Judicial, Legislativo y Ejecutivo en la transgresión de las Leyes…
Ambos representantes del Senado asumen que los vecinos de Guanajuato, Tamaulipas y Veracruz deseamos la desaparición de poderes…
Ambos representantes del Senado creen ser portadores de nuestra voz… cuando el ciudadano, sea de Guanajuato, Tamaulipas y Veracruz, tenemos muy en claro cuáles son nuestras prioridades: seguridad para nuestras familias y empleo.
Hemos platicado en este espacio de la alternancia que en breves lapsos al menos en Veracruz, hemos vivido… del PRI pasamos al PAN y del PAN, a Morena… en términos democráticos, es un hecho que hay que celebrar pero en términos políticos, hay que lamentar…
Al parecer, la alternancia se está entendiendo como un instrumento de “venganzas políticas” en algunos casos que bien pueden ser acomodados, dependiendo de los intereses de cada quien; por ejemplo, hay quienes celebran la persecución de Winckler como también la liberación de duartistas; hay quienes lamentan que Bermúdez ya no esté en la cárcel como la exposición de Duarte como si fuera un Rock Star en medios impresos, twitter y TV…
Al final, el vecino de Guanajuato y Tamaulipas viven una realidad alejada, muy alejada de los pleitos que se dan en estos momentos en el Senado… dejo aparte a los vecinos de Veracruz, que si bien, ya somos víctimas de la inseguridad y violencia que reina en la entidad, al parecer ahora también somos rehenes de los intereses políticos de dos partidos que buscan destrozarse a muerte antes que pensar realmente en solucionar los problemas que vive el veracruzano…
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