El día de ayer en Xalapa una persona fue ejecutada en los corredores de la unidad habitacional Agua Santa. Tres balazos le dieron, dos de ellos en la cabeza y aunque sobrevivió por unos minutos al ataque, finalmente murió en el hospital. En Poza Rica, Veracruz dos jóvenes, de 25 y 27 años fueron acribillados sobre la calle Abrahán Lincoln en la colonia 27 de septiembre.
Estos crímenes se suman a los de días anteriores en Las Choapas, Fortín de las Flores y Xalapa, donde las ejecuciones se siguen repitiendo. ¿Qué se tendrá que hacer en Veracruz? La misma Arquidiócesis de Xalapa señala que secuestros, extorsión y ejecuciones no cesan, antes bien los índices de delincuencia se elevan. ¿Será que con este gobierno sólo nos quedará encomendarnos a Dios?