Esta agrupación es presidida por José Alonso Trujillo Domínguez, identificado plenamente en las iglesias cristianas, de hecho su tirada es mover a los feligreses para alcanzar su cometido. En un comunicado apuntó que Convicción Mexicana tiene contemplado realizar en los meses de septiembre y octubre la mayoría de las 240 asambleas distritales que se ha propuesta para conseguir el registro.
Pues esta es la tabla de salvación de Rafael Ochoa Guzmán, por este proyecto el exsecretario del SNTE le da la espalda a una fuerza civil como RSP, que va en caballo de hacienda para convertirse en partido político. Por cierto, ya aparece en Facebook una cuenta con su nombre y en su portada aparece el logo de Convicción Mexicana y el lema: «Por la certeza de un futuro mejor». Por lo pronto, en las redes sociales muchos maestros no lo bajan de esquirol y traidor.