Familiares de la joven acusada señalan que Areli “N” salía de su trabajo en el Centro Comercial “Cúspide”, cuando fue detenida, sin que le dieran a conocer porque se la llevaban. Esa misma noche, el chofer de un transporte de trabajadores fue detenido en la esquina de su casa, él tomaba una cerveza con amigos cuando vieron llegar una camioneta tipo Ram de doble cabina, con personas armadas que arribaron casi de manera sorpresiva. Lo aprehendieron únicamente preguntando su nombre. Y según Éder “N”, uno de los que venían en la camioneta dijo “ya chingaste a tu madre” y lo subieron. Para entonces nadie sabía que también había sido detenido un joven más, Francisco “N”, de oficio taxista, que de igual escuchó la misma amenaza para así ser levantado
Hasta ahora se conoce que las tres personas detenidas fueron llevadas esa noche a instalaciones del penal de Barrientos, donde recibieron golpes con los codos en la cabeza, en el estómago, les colocaron bolsas de plástico en la cabeza y les clavaron agujas en el pecho, en las axilas. Así lo aseguran familiares. Estas presuntas irregularidades y delitos cometidos contra estos tres ciudadanos mexiquenses ya fueron conocidos por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, con el folio 2019/68419. Ante esto las familias exigen la revisión de este caso exigen todo el peso de la ley contra los ministeriales y que se aclare todo, porque esto ya está destruyendo a tres familias, afirman.