Una imagen dice más que mil palabras. Y es que en el evento en el que el gobernador entregó las escrituras de áreas verdes que el gobierno del estado dona al municipio de Xalapa, muy cusca la diputada silenciada, Ana Miriam Ferráez, la del toque de queda a las mujeres para evitar feminicidios, andaba encima del gobernador, invadiendo el espacio de otros funcionarios para tocar el brazo del mandatario veracruzano, para conseguir que éste se fijara en ella, para que advirtiera la mirada de su fan “number one”.
La misma diputada subió fotografías donde se advierten unas miradas castigadoras al gobernador, miradas que a cualquiera dejarían frío; o con escalofríos. En una de esas fotos que circulan en redes la diputada se muerde el labio superior, como si con ello pudiera evitar írsele a las mordidas al primo hermano de Eleazar Guerrero.
¿Se imagina usted como primera dama de Veracruz a Ana Miriam Ferráez? Un gobernador como Cuitláhuac García se la merece. Sería tan interesante un reality en el que pudiéramos conocer la cotidianeidad de esta pareja tan pareja. Las pláticas de sobremesa, los momentos de reflexión de una mujer que cada que abre la boca, le cierra la inteligencia a muchos.
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