A un año del triunfo AMLO exige a sus gobernados, lo que no exige a sus militantes. ¡No mentir, no robar, no traicionar!, ya es un mito

Córdoba, Ver. El presidente Andrés Manuel López Obrador, acompañado por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez FOTO: JUAN JOSÉ ENRIQUEZ/FOTOVER
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Armando Ortiz / Hay un pasaje en la vida política de Andrés Manuel que para muchos es una muestra clara de su honestidad. En febrero de 2006 López Obrador, en su primer intento por ser presidente de México acudió a invitación de Emilio Azcárraga Jean a una reunión en la que participaron otros candidatos y los grandes empresarios. Roberto Hernández, quien acababa de vender Banamex a Citigroup quiso poner en ridículo al candidato. El empresario le explicó “de forma sencilla porque parece que usted no entiende nada”, la manera como se hizo la venta del banco, una transacción que no aportó impuestos al erario público, cosa que dijo Hernández, “estas operaciones están exentas de impuestos”. López Obrador le dijo de corrido al banquero: “Respecto de lo segundo (la venta de Banamex), no tengo por qué discutir con usted si fue legal o no ¡No pagar impuestos es inmoral y con eso me basta!”. En 2006 ahí radicaba la fuerza de López Obrador, esa fuerza que 12 años después lo llevó al poder en unas elecciones históricas por el apoyo masivo que recibiera en las urnas. Lamentamos decir que ese López Obrador ya no existe. A López Obrador el tiempo lo ha domado, lo ha ablandado, ha disminuido su consciencia moral. Ya como presidente, ya con el poder en las manos, López Obrador pide a los ciudadanos no mentir, no robar, no traicionar. Sin embargo, no es así de riguroso con los militantes de su partido que ostentan alguna responsabilidad de gobierno. Ellos si pueden mentir, robar y traicionar y AMLO les levanta la mano, los defiende, o les da una palmada en la espalda.

Fernando Yunes, alcalde de Veracruz, 4º lugar en ranking de aprobación

De acuerdo con la última encuesta de Massive Caller, sobre los alcaldes con mayor aprobación y los alcaldes con menor aprobación, Fernando Yunes, alcalde del puerto de Veracruz, está en el cuarto lugar del ranking de los mejores alcaldes de México. En el primer lugar de este ranking está Alfredo Lozoya de Parral, Chihuahua, en segundo lugar, Héctor Israel Castillo de Santa Catarina, Nuevo León, en tercer lugar, César Garza de Apodaca, Nuevo León, y en cuarto lugar, Fernando Yunes del puerto de Veracruz. El sondeo se levantó el 29 de junio a 600 personas por municipio. En la encuesta están incluidos 100 municipios del país. Cabe señalar que en el mes de abril el periódico El Heraldo de México realizó una encuesta similar, donde calificó a los alcaldes más capaces e incapaces del país. De los dos mil 462 alcaldes del país, Fernando Yunes se colocó entre los primeros 14. En esa misma encuesta de abril de 2019, Hipólito Rodríguez quedó entre los cinco alcaldes más incapaces.

Alcaldes de Morena, entre los peores del país según encuesta de Massive Caller; de los 20 peor calificados, 12 son de Morena

La encuestadora Massive Caller dio a conocer una encuesta en la que incluye a cien municipios de México. En esta encuesta se califica el nivel de aprobación que tienen los alcaldes por parte de sus gobernados. Cabe resaltar que en esta encuesta en los primeros diez lugares no aparece ningún municipio gobernado por Morena. Los diez primeros lugares son alcaldes del PAN, PRI y un independiente, Alfredo Lozoya de Parral, Chihuahua, que por cierto es el mejor calificado; en el número cuatro aparece Fernando Yunes de Veracruz. No obstante, en los últimos 20 lugares hay al menos doce alcaldes de Morena que gobiernan un municipio y que son los peor calificados. Morelia, Cuautitlán Izcalli, Atizapán, Coacalco, Tlalpan, La Paz, Cuauhtémoc, Los Cabos, Tláhuac, Tehuacán, Villahermosa y Oaxaca. Si ampliamos el universo a los últimos 50 municipios, con un porcentaje de aceptación abajo del 31.4 por ciento, encontramos que, de esos 50 municipios, 37 son gobernados por Morena. La encuesta incluye los municipios de la Ciudad de México que antes eran consideradas como delegaciones y que tuvieron una votación masiva a favor del Movimiento de Regeneración Nacional. Lo cierto es que los militantes de Morena se están dando cuenta que no todos los candidatos por los que votaron son López Obrador, por lo que las cualidades del líder nacional no se pueden trasladar a los alcaldes de su partido.

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