El estudio mostró, mediante radiografías hechas a adolescentes y jóvenes, una pequeña protuberancia en forma de pico en la zona occipital del cráneo. En 2016, las pruebas hechas a 218 pacientes revelaron que el 41 por ciento de éstos manifestaba este pequeño pico de más de 20 milímetros. En 2018, de mil 200 personas examinadas, se descubrió que la malformación surge, principalmente, en personas de entre 18 y 30 años.
Esta deformación en la estructura craneal se debe a la postura inclinada que toma la cabeza a la hora de mirar el celular. Al respecto, David Shahar explicó: «Mantener esta posición por periodos prolongados de tiempo puede aumentar la presión en la coyuntura donde los músculos del cuello se adhieren al cráneo, y es probable que el cuerpo responda creando nuevos tejidos óseos, lo que origina a esa protuberancia». Vale señalar que esta protuberancia puede llegar a ser visible en personas calvas, además de poder sentirse al tacto.