Que no se olvide que mientras los maestros disidentes recibían los madrazos por oponerse a la Evaluación Docente, que venía dentro de la Reforma Educativa como caballo de Troya, el líder del SNTE, Juan Díaz de la Torre, recibía dinero del Gobierno Federal, por eso no se movió para defender a los maestros. Resulta que la Secretaría de Educación Pública (SEP) le dio al SNTE mil 250 millones de pesos para divulgar virtudes de la Reforma Educativa. Por eso las palabras del presidente seguramente calaron hondo en la gente de Alfonso Cepeda.
«No hay riesgo de que el sindicato meta mano en el reparto de plazas porque se ajustará a lo que se va a aprobar en las leyes, porque faltan las leyes secundarias», aseguró el titular del Ejecutivo federal. También, afirmó que con este nuevo modelo educativo se busca tomar en cuenta a los maestros y convencer que, para mejorar en la materia, es necesaria la participación de la ciudadanía. Pues como dijo, Santo Tomas, hasta no ver no creer.