La titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), la doctora Sandoval Ballesteros, cuando encabezó la inauguración de la Segunda Reunión Nacional del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública señaló lo siguiente: «Todos tenemos que velar para que se cumplan las mejores prácticas de adquisiciones, transparencia y rendición de cuentas en el uso de los recursos públicos, y la Función Pública estará ahí para ayudar a cumplir ese objetivo». Pues ha trascendido que en el escritorio de esta funcionaria ya descansa un expediente con copia para la Auditoría Superior de la Federación (ASF) con el nombre del extitular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño Mayer.
Es una investigación que se ha llevado con mucho cuidado, donde se podría determinar responsabilidades administrativas y quizá penales en contra de Nuño Mayer. Y es que no es cualquier cosa, la presunta ilegalidad radica en un sobreejercicio presupuestario de más de dos mil 600 por ciento para adquirir publicidad gubernamental durante 2017. En otras palabras, gastaron más de lo que se les había autorizado.
Se recordará que la Cámara de Diputados sólo le habían acreditado a la SEP comprar 70.6 millones de pesos, pero gastaron casi dos mil millones. Ojalá y de verdad se busque la aplicación de la justicia y se dé un escarmiento para que los nuevos funcionarios no hagan mal uso de los recursos públicos.
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