Édgar Landa Hernández* / La goleada que le endilga el equipo de fútbol de primera división, tuzos del Pachuca al endeble y apático equipo de los tiburones rojos de Veracruz, 9 a 2, no es más que un antecedente que se veía venir desde hace ya mucho tiempo, con un equipo parco en todas sus ofensivas, con severas carencias de marcaje, así como en sus tropas ofensivas el equipo de los otrora escualos aguerridos solo se convirtió en un festín para el equipo de la bella airosa. Sin una forma de saber que estaba sucediendo por parte de los escualos, los hidalguenses hicieron y deshicieron a su antojo ante un equipo mediocre, que solo ha servido de escalón para los demás equipos.
¿Pero qué ha sucedido con los tiburones rojos para que sea solo el hazmerreír del fútbol mexicano? ¿Será acaso la intromisión de los hombres de pantalón largo que no han hecho las contrataciones pertinentes para poder armar un trabuco para que de el ancho en estos breves torneos en donde no hay oportunidad de practicar? ¿será acaso el entrenador? Si así fuere, han pasado más de diez gentes desde que se retornó nuevamente a la primera división y los resultados siguen siendo los mismos. Entre ellos el uruguayo Roberto Matosas, que de su mano fue un equipo que dio presencia y sobre todo alegría a la noble afición jarocha. Otros que también portaron la camisa de entrenador fue Arturo Coimbra, brasileño y hermano de Zico, el chileno Carlos reinoso, el gran jefe tomas Boy entre otros.
La falta de una renovación, la nula capacidad de jugadores, contrataciones que no han servido de nada para que el equipo repunte, o siquiera tratara de permanecer en la primera división. Aunado a una mala administración; todo se conjunta para ser el peor equipo de la primera división nacional. En los últimos torneos.
Atrás han quedado figuras que le dieron realce al equipo, cuando la ola roja y la gran batucada eran los artífices para que el coloso del fraccionamiento Virginia se cimbrara cuando alguno de ellos lograba horadar el arco del conjunto contrario.
Tal es el caso de los argentinos, Jorge comas, que en su primera incursión en el balompié nacional se vistió de campeón goleador, seguido de su coterráneo, el mariscal Omar palma; dueño de la media cancha, con un olfato de ubicación y pases precisos. Así mismo, los incansables Isaac terrazas, el todo pundonor y garra, Víctor el “Harlem medina” el simpático “Archie flores” José Luis González china, que con su toque educado proveía a los delanteros de balones. Al igual el chaparrón pascual “pato Ramírez, El ídolo de Tepito Cuauhtémoc Blanco, que le dio un giro inesperado al equipo llevándolo en sus hombros para hacer un equipo líder. Y por último el mejor portero de todos los tiempos, el Superman Adolfo Ríos. Es triste ver como un equipo tan querido, con una afición noble se vaya de nuevo a la primera división “A”
Solo se recoge lo que con anterioridad se sembró. Es la ley de la vida.
*Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores independientes A.C.
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