Salvador Muñoz / Con 45 años aproximadamente, Manuel Arroyo está considerado por el mundo de los “bisnes”, como uno de los jóvenes empresarios más exitoso en este siglo, tanto, que de haber iniciado su negocio con componentes para parabólicas, hoy, además de ampliar sus horizontes en materia de telecomunicaciones, igual abrió hace menos de diez años el abanico en los medios de información, adquiriendo El Financiero, un periódico que marcó igual un parteaguas por el tema a tratar, que son las finanzas, las cuales, sólo eran y son contempladas, por lo regular en los medios tradicionales vía una sección o bien, en revistas quincenales o mensuales para atender el asunto.
El Financiero llamó mi atención hace unos días, siendo precisos el lunes, cuando en primera plana, abriendo columna, vi la nota: “Aumenta inseguridad con Gutiérrez Maldonado”.
La información mandaba a la página 44 donde junto con tal, estaba el comentario de Pablo Hiriart, Uso de Razón, titulado: “Veracruz, el infierno”.
Muy independiente del trabajo periodístico donde dan cifras, datos y tendencias, cualquiera pudiera preguntarse qué hace este tipo de “nota roja” en un periódico especializado en negocios y finanzas. A lo mejor no lo parece, pero la inseguridad es un tema que visto en frío, nos puede dar números escalofriantes, que nada tienen que ver, por citar un dato que nos debe estremecer a todos, con las 77 mujeres asesinadas en un lapso de cuatro meses aproximados… ni con el número de secuestros… ni con la cifra de ejecutados… etcétera.
Entonces, ¿por qué ocuparse El Financiero en este tema? Yo veo dos opciones:
La primera:
La inseguridad repercute en nuestro bolsillo de un modo u otro… desde cuando te roban el celular, que muy independiente de lo que cuesta un aparato de éstos, es recuperar fotos, videos, números, datos que uno resguarda en él… o cuando te cristalean el carro, que implica reponer de inmediato la ventanilla y si te volaron alguna pertenencia o el estéreo, hacer cuentas si puedes comprarlo de nuevo o aguantar el derrame de bilis… ¡ya ni se diga cuando entran a robar a tu casa! O si quieres evitar ello, comprar candados, cerrojos de alta seguridad, alarma, barrotes en ventanas y puertas… la inseguridad tiene un costo en nuestro bolsillo y a veces se ve, a veces no…
Sólo imagine lo que implica para una familia el viacrucis de que algún pariente sea asaltado y herido… el hospital, la atención, el medicamento, etcétera… o en el peor de los casos, que el crimen llegue a sus últimas consecuencias con el deceso de la víctima… ahí paro de hacer cuentas…
En sí, este es mi punto en cuestión de porqué El Financiero tendría que sacar a la inseguridad en Veracruz…
La segunda opción es política.
Este martes, el gobierno del Estado de Veracruz junto con el secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, interpusieron denuncia ante la Fiscalía General de la República, contra quien resulte responsable por lo que ellos llaman el Megafraude de las Cámaras de Videovigilancia.
En este asunto, de manera inmediata, posicionan a dos elementos a destacar:
El primero, Miguel Ángel Yunes Linares, como Gobierno del Estado; el segundo, la empresa Comtelsat. Ambas partes hicieron un contrato por 1 mil 100 millones de pesos para equipar a la entidad con un sistema de videovigilancia. Sin embargo, de acuerdo a lo expuesto por el titular de la SSP, encontró que únicamente el 28 por ciento de 6 mil 324 cámaras, equivalente a mil 695, operan con deficiencias. Todavía peor: hay un total de 4 mil 354 cámaras sin operar.
La respuesta de Comtelsat la dio a conocer hace varios días, cuando expuso que el Gobierno estatal obstruía su trabajo en aras de continuar con la colocación del sistema; agregó que si hubo retraso, fue porque el anterior gobierno, sobre la marcha, puso varios detalles que había que cuidar, ya fuera por sitios históricos, colocación de postes (recuerdan que hubo mucho relajo por ello) y un sinfín de pormenores.
Ah, sólo para ubicar, el dueño de Comtelsat es Manuel Arroyo, propietario de El Financiero, uno de los jóvenes empresarios más exitosos de este nuevo siglo, y sobre quien de inmediato, si la denuncia procede, avanza o camina, será al primero al que las autoridades deberán acudir para que explique ese Megafraude de las Cámaras de Videovigilancia que sospecha Hugo Gutiérrez Maldonado, hay en este contrato entre Gobierno del Estado y dicha empresa… esto apenas empieza.
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