Hernán Cortes ocupando el mando como general de la Nueva España y alcalde de Santiago de Cuba, llega en 1519 con el propósito de conquistar nuevas tierras e imponer su cultura, así como su política y religión. La cultura maya fue su primera conquista en el Nuevo Mundo. A 500 años de su llegada a México los restos de Hernán Cortés se encuentran en la calle República del Salvador a tres cuadras del Zócalo de la ciudad de México. Como dato interesante, los restos de Hernán Cortes se encuentran en el mismo lugar donde se dio el primer encuentro con el emperador de Tenochtitlan, el gran Moctezuma.
La placa que indica donde se encuentran los restos de Hernán Cortes, con el tiempo ya es poco visible y ha perdido su valor histórico. Hernán Cortés muere en Sevilla, España el 2 de diciembre de 1547, pero dejo en muy claro en su testamento que quería que sus restos terminaran en Coyoacán donde conoció a Moctezuma. El hecho de que ahora su tumba este olvidada, nos deja muy en claro que, a pesar de sus victorias, y de ser nombrado el conquistador de la Nueva España, con el pasar del tiempo lo único que Cortés ha ido conquistando es polvo.