Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. La directora general de Cultura de Paz y Derechos Humanos, Mayra Ledesma Arronte, lucró con el dolor de los colectivos de familiares de desaparecidos para llegar a un cargo público, acusó Sara González Rodríguez, madre de Ivanhoe Mass González y vocera del Colectivo por la Paz Xalapa.
La tarde de este jueves 14 de marzo, la mujer protestó en la explanada de Plaza Sebastián Lerdo de Tejada para exigir la aparición con vida de su hijo, quien fue levantado el 14 de marzo de 2010 por policías intermunicipales de Veracruz-Boca del Río.
La entrevistada indicó que varios funcionarios del actual gobierno estatal usaron a las víctimas para llegar a un puesto político.
En ese sentido, consideró que funcionarios como Ledesma Arronte han dado la espalda al gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
«Que lamentable todo esto, porque lo vimos en el congreso, en las votaciones que hubo contra el fiscal general Jorge Winckler Ortiz, pues sus mismos morenistas le dieron la espalda, usaron el nombramiento de Morena para poder llegar al puesto y a la mera le dieron la espalda y no se la dieron a él, se la dieron al pueblo».
A juicio de González Rodríguez, los familiares de desaparecidos que no forman parte de algún colectivo son excluidos de mesas de diálogo para atender su situación.
Lo anterior, señaló, por instrucciones de la Directora General de Cultura de Paz y Derechos Humanos.
Recordó que dos madres exhibieron esta situación en una pasada reunión que tuvieron familiares de desparecidos en el Senado de la República.
«La señora Mayra se lo dijo a una compañera que no pertenece a algún colectivo y qué triste que ella esté en este puesto de la paz y que no lo esté llevando a cabo. Ya son dos personas que las excluyeron. Una es de Orizaba y otra de Córdoba, ellas acaban de hablar en el Senado de la República».
La entrevistada criticó la actitud y decisión de la recién funcionaria, exmiembro del Comité en Defensa de la Universidad Veracruzana y catedrática de Antropología en la máxima casa de estudios de la entidad.
«Mayra Ledesma Arronte debía poner un poquito de paz y hacer que todos los colectivos sean considerados como lo que somos, víctimas, todos somos víctimas porque se está dando el problema que si no somos colectivos no podemos entrar a las reuniones, entonces, las personas que por miedo o simplemente no quieren pertenecer a algún colectivo tienen el derecho a ser consideradas como lo que son, víctimas», remató.
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