El incendio de Las Vigas poco a poco se ha ido conteniendo, esto gracias al trabajo de los pobladores, de las autoridades municipales, estatales, pero sobre todo gracias al trabajo de los helicópteros del Gobierno Federal, que son los que llegan a los lugares más inaccesibles, donde el fuego no permite avanzar. El trabajo de los helicópteros que recogen agua y la derraman en las zonas incendiadas ha sido constante y bien coordinado.
La tarde de este martes se pudieron apreciar varias naves surcando el cielo por encima del bosque de la zona de Las Vigas, unos de regreso para recargar agua, otros rumbo al incendio para depositar su descarga. Sin estas naves el incendio seguiría sin control. Curiosamente algunas de estas naves eran las que estaba rematando el Gobierno Federal, y es que el presidente López Obrador, en un afán de austeridad, se imagina que todos estos helicópteros son gastos innecesarios.
El incendio de Las Vigas está demostrando que algunos aparatos es mejor tenerlos, aunque no se necesiten, que necesitarlos y no tenerlos. La austeridad se puede aplicar en otros rubros, pero en la seguridad y protección civil no se debe escatimar.
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