Durante su reciente Consejo Político Nacional, los priistas aprobaron que el expresidente Enrique Peña Nieto asuma el cargo de Consejero Político, por lo que de ahora en adelante habrá de formar parte activa en la toma de decisiones al interior del instituto político. Además, se ha anunciado que solicitarán al INE que los apoye para llevar acabo la elección próxima, esto con el fin de garantizar la transparencia y la democracia, dos de los muchos atributos ausentes en la vida del PRI.
Por cierto, la exgobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, quien es hasta ahora la candidata más fuerte para quedarse con la dirigencia nacional. Será en agosto cuando la militancia nacional decida a quién darán la responsabilidad de conducir lo poco que queda del PRI, que, sin lugar a dudas, deberá de ser alguien que cuente con toda la experiencia para sacar al partido del hoyo inmenso al que ha caído. Esta no será una tarea fácil, de ahí la importancia de que las y los priistas elijan, y elijan bien.