Hugo Gutiérrez Maldonado, santo patrón de los teporochos; urgía que Miranda de Wallace retuiteara algún logro

Hugo Gutiérrez Maldonado FOTO: WEB

Se acabaron los anexos de alcohólicos anónimos, pues al parecer, de ahora en adelante, sólo las personas que de manera voluntaria quieran hacerlo, podrán entrar. El caso es que una familia que ha soportado por años la enfermedad alcohólica de algún pariente, hijo, padre, hermano, esposo, no podrá solicitar a los voluntarios de los centros contra las adicciones que vayan por el alcohólico y lo anexen, haciéndose ellos responsables de esa reclusión. Y es que bastará con que el alcohólico, llámese teporocho, grite a todo pulmón que lo secuestran, para los elementos de Seguridad Pública, del empistolado Hugo Gutiérrez Maldonado, acudan en su auxilio.

A la “víctima” la soltarán para que siga fastidiándole la vida a los hijos, a la esposa, a los hermanos, a la madre. Pero a los voluntarios se les llevarán a la cárcel, porque ya sabe usted el dicho: «Primero dispara y luego verigua». Eso es lo que se entiende de la réplica que el secretario de Seguridad Pública manda al periodista Ignacio Carbajal, quien fue el que sacó a la luz el tema. «Era labor obligada de los elementos policiales proceder de la forma que lo hicieron».

Estamos seguros que los voluntarios explicaron cuál era la situación, vaya, hasta la madre del alcohólico defendió a los voluntarios. Pero como urgían “logros”, pues lo más importante era sacar el boletín de la aprehensión de una banda de secuestradores y de la víctima liberada parta que la “quedabien” de Miranda de Wallace lo retuiteara.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario