En esa declaración señaló: «Tarde que temprano saldrán a la luz toda la bola de cosas que se están armando, sólo está demorando lo inevitable que es mi liberación». El exfiscal de Veracruz calcula que, si un sujeto como Arturo Bermúdez Zurita pudo ser liberado, un sujeto al que acusan de delitos más graves que los suyos, entonces él mismo podrá obtener su libertad.
Luis Ángel “N” entiende que el gobierno actual tiene una parafilia por los exfuncionarios duartistas y fidelistas. Su esperanza está en que Cuitláhuac García recupere un poco de legitimidad, que se deshaga un poco del repudio que se ha ganado, para con ello crear el contexto de su liberación. Así como están las cosas, con el encono que muchos sectores tienen en contra del gobernador, sacar a Luis Ángel “N” de la cárcel sería como echar limón en los ojos de los veracruzanos.