Tuvo el valor Ana Miriam Ferráez de salir y dar la cara ante los reporteros que cubren la fuente del Congreso de Veracruz después del dislate que cometiera el día anterior. Ana Miriam, como reportáramos ayer, propuso de manera informal que se diera un toque de queda a las 10 de la noche para que las mujeres no salieran de sus casas y así evitar violencia en contra de ellas y disminuir los feminicidios. Apenas se pronunció de inmediato le llovieron críticas no sólo a nivel estatal sino nacional.
La tarde de este martes Ana Miriam ofreció disculpas a todas las mujeres veracruzanas, quienes dijo, sufren de violencia discriminación y misoginia. “Mi admiración a todas las mujeres, jefas de familia que trabajan todos los días y hasta altas horas de la noche”, señaló después de que su propuesta limitaría a muchas mujeres que trabajan en turno nocturno. Ceñida a un guión escrito, Ana Miriam no se salió de ese guion y tampoco contestó preguntas, a sabiendas de que nuevamente sus respuestas la pudieran meter en algún problema. Esta vez tampoco se refirió a sus críticos, a los que en algún momento llamó “perros”, sólo leyó un escueto mensaje que incluía disculpas y solidaridad con las mujeres.
Ana Miriam dijo que es de humanos errar, aunque en ella errar se le está volviendo una constante costumbre. “Soy la voz de muchas mujeres en este Congreso y lo seré siempre”, dijo una persona que pensaba que era buena idea limitar el libre tránsito de esas mujeres. Ana Miriam dijo que se sumaba a los esfuerzos del gobernador. (¿cuáles?), para erradicar la violencia y fortalecer los derechos de las mujeres. Al final la diputada de Morena salió de la sala de prensa sin contestar ninguna pregunta.
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