Francisco de Luna / Xalapa, Ver. Los trabajadores sindicalizados de la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) de Xalapa denunciaron que el líder de esta agrupación, José Luis Hernández López, los amenazó y estuvo a punto de estallar la violencia durante la asamblea en la que se abordaban la revisión salarial.
Y es que fue en ese momento que un grupo de empleados recordaron que el sindicato les adeuda un promedio de 6 millones de pesos, lo que desató la furia del dirigente quien ha permanecido durante 22 años en el cargo.
Alberto Salas Franco, uno de los trabajadores sindicalizados afectados, narró que los hechos ocurrieron el pasado fin de semana donde hubo agresiones y hasta llegaron personas armadas para amedrentar durante la reunión que se llevó a cabo en el salón de CMAS ubicado en la avenida México de la colonia Lagunilla.
«Hubo amenazas, llevó mucha gente, paleros de José Luis Hernández, armados y amedrentando a todos los compañeros. Hubo amenazas y que nos atengamos a las consecuencias y terminó por abandonar la asamblea».
Explicó que durante la asamblea hubo jaloneos de ambas partes, pues dijo que la gente del dirigente al actuar de manera violenta, los sindicalizados resistieron los ataques y eso ocasionó que el caso se tornará más dramático.
«Esa es la gran diferencia, que nosotros nos defendemos solos y él lleva gente que lo defiende», aseguró Alberto Salas Franco, durante la denuncia pública en el centro de la ciudad de Xalapa.
Además dijo que otro de los puntos que molestó al líder José Luis Hernández López, es que cientos de empleados han iniciado movimientos para destituirlo como dirigente.
Planean más denuncias contra Hernández López, pues una ya fue interpuesta ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por la retención de los ahorros que debieron ser entregados a más tardar el 20 de diciembre.
A pesar de la denuncia el personal de la FGE no ha colocado los sellos de clausura a las oficinas del Sindicato ubicadas en la calle Alfaro número 31 de la zona centro de la capital veracruzana.
La inconformidad de los empleados comenzó el día 28 de diciembre y hasta el momento continúan tomadas por los trabajadores que exigen los pagos de sus ahorros y que además buscan sustituir a su dirigente.
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