Juan Bueno Torio demandó a la periodista Ana Lilia Pérez por los señalamientos que ella hizo respecto a la actuación del servidor público en Pemex Refinación. En dos libros, Camisas Azules, manos negras, y El Cártel Negro la periodista que tuvo que exiliarse en Alemania debido al acoso judicial de Bueno Torio, documenta el daño patrimonial que causara a la paraestatal Bueno Torio durante su paso por Pemex Refinación.
Ahora, el exfuncionario sale a decir que a López Obrador le falló la logística y que le ganó la inexperiencia: «La inexperiencia les está cobrando la factura y no se prepararon adecuadamente con la logística de importaciones para atender las demandas de fin de año, los rebasó el problema y además que las refinerías no están produciendo lo que deberían de producir».
Bueno Torio sabe de lo que habla, el de Córdoba conoce bien las entrañas de la paraestatal y, por supuesto, que estuvo enterado del huachicoleo en los tiempos de Vicente Fox. Tal vez a él no le corresponda decir por qué no se combatió como se debía el robo de combustible.
Sin embargo, la investigación de Ana Lilia Pérez lo involucraba en el tema y por lo mismo Bueno Torio buscaba que un juez coartara la libertad de expresión de la periodista para que ella no publicara información relacionada con él o con su actuar. ¿Qué es lo que Bueno Torio no quería que se supiera sobre su administración en Pemex? Si se investiga bien, ya se sabrá.
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