¡Cuidado con los que incitan a la violencia! ¡Cuidado con los que señalan a mansalva a los supuestos delincuentes! Esos sujetos, los que inician los linchamientos, en ocasiones son tan criminales como los sujetos buscados. Imagine usted que uno de esos sujetos que incitan al linchamiento lo señalan a usted, que no tuvo nada que ver con el crimen; imagine que el tipo sólo lo señala por ocio, diversión o maledicencia; basta que la gente le siga el juego al sujeto para que firmen su sentencia de muerte.
Ya se han dado casos. ¿Ya se olvidó de lo que sucedió el 30 de agosto en Acatlán, Puebla? Un par de alcohólicos señalaron a un joven y a su tío de participar en un delito y el pueblo se les fue encima y los asesinó quemándolos en vida. Pero eran inocentes, después se supo.