Cabe destacar que desde que el juicio empezó, hace ya varias semanas, El Chapo ha tenido prohibidas las visitas, por lo que no había podido siquiera ver a sus hijas. Los reportes de algunas personas que estuvieron presentes, señalan que al capo de la droga se le dibujó una sonrisa en el rostro tan pronto vio que su esposa llevaba con ellas a las niñas, de hecho, tanta fue su alegría que no se contuvo y se levantó de su asiento, pero los policías lo obligaron a sentarse. Algunos aseguran que hasta tuvo ganas de llorar pero que aguantó.
El juicio quedará suspendido, y se reanudará una vez que hayan pasado las celebraciones de fin de año, por lo que este ha sido un detalle muy especial que Emma Coronel ha tenido con su esposo. Al menos, el que fuera el narcotraficante más buscado del mundo, ha tenido la oportunidad de ver a su esposa y a sus hijas antes de que concluya 2018. El próximo será definida su situación jurídica y se sabrá finalmente cuál va a ser la condena a la que se condenará El Chapo, pero por lo pronto, estamos seguros de que luego de la visita, pasará una feliz Navidad.