Ciudad del Carmen, estado de Campeche, ha sido la burla a nivel mundial por un escándalo durante un intercambio navideño que se viralizó en redes sociales. Y es que, en una reunión de trabajo, por la cercanía de los festejos de fin de año, un hombre identificado como Roberto R. decidió regalarle un sexy juego de lencería a una de sus compañeras; sin embargo, no contaba con que ella abriría su obsequio frente a todos los invitados, incluyendo su esposa, pese a que intentó una y otra vez impedir que la mujer destruyera la envoltura en el salón de fiestas. No obstante, fue ovacionada varias veces con la frase: «¡Que lo abra!» hasta que accedió a hacerlo y se descubrió que al interior había un baby doll de encaje y una llamativa tanga roja, situación que inmediatamente hizo creer a la esposa que Roberto la engañaba con una de sus amigas del trabajo.
En segundos, se desató una riña en el lugar: la esposa lanzó una serie de golpes a la otra mujer, mientras la sujetaba del cabello. Incluso, compañeros de trabajo y meseros tuvieron que intervenir para separarlas; pues la esposa de Roberto parecía no tener intenciones de tranquilizarse por los gritos, insultos y ofensas que lanzaba a su oponente.
Este acontecimiento llamó la atención rápidamente a través de las redes sociales, situación que motivó a Seguridad Pública de aquel estado a lanzar una recomendación a la ciudadanía para «no hacer este tipo de regalos a sus compañeros de trabajo, y menos si se es acompañado por la esposa». Y es que esos servidores públicos deberían ponerse a trabajar y atender realmente las demandas en materia de seguridad del lugar, pues en Campeche se contabilizaron 795 robos de enero a octubre en este año, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), por lo que los policías no pueden argumentar que no tienen “chamba” y, por ello, están pendientes de pleitos maritales en fiestas privadas.
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