El presidente constitucional de México ha sido muy categórico en sus declaraciones. En esta ocasión, en su discurso desde el Zócalo de la ciudad azteca, insistió en la democratización sindical. El jefe el Ejecutivo federal señaló que el gobierno respetará la autonomía y soberanía sindical, sin embargo, insistió en que es necesario que las elecciones sean democráticas con un voto libre secreto.
Sin mencionar al SNTE, sus palabras tuvieron dedicatoria. Y es que en estos momentos de festejo por la llegada del nuevo presidente y por su promesa de cancelar la mal llamada Reforma Educativa, los maestros buscarán el relevo de Alfonso Cepeda Salas.
Sin embargo, el grupo de Cepeda Salas se quiere quedar al frente hasta el 2024. Además, por otro lado, está la CNTE, un grupo de aguerridos maestros que en estos momentos están muy cerca del presidente, éstos también quieren que alguien de su gente esté al frente de la dirigencia sindical.
Aunque no será fácil, ya que los seguidores de la maestra Gordillo, agrupados en Maestros por México (MXM), han tenido muy buena aceptación en todo el país fortaleciendo estructuras de maestros. Lo cierto es quien llegue al SNTE, será por el voto universal, un voto libre y secreto. La línea del estado, esa ya se acabó y todos debemos acostumbrarnos, incluidos los líderes charros.
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