Tantos fueron los comentarios negativos que se acumularon en sus redes personales, que la conductora tuvo que aprovechar un espacio frente a la cámara para aclarar algunos detalles sobre su vestuario, cosa que no sirvió de mucho pues los descalificativos siguieron y siguieron. Horas más tarde de la polémica, Atala Sarmiento se dio a la tarea de eliminar los comentarios negativos pues, según ella, había algunos muy crueles.
Bien dice el dicho: “a algunas personas, hasta lo que no comen les hace daño”; sorprende que después de tantos años de trayectoria, la conductora no haya aprendido a hacer oídos sordos a los comentarios que solamente buscan hacerla pasar malos ratos. Que se ponga lo que se quiera poner y que le valga lo que la gente opine.