Quien debe tenerlos de cabeza es Emiliano Salinas, quien se metió como discípulo de Keith Raniere, líder de NXIVM, una secta que reclutaba mujeres para esclavizarlas, según reportes de importantes medios de los Estados Unidos. El representante de Raniere en México era Emiliano Salinas, quien además era un amigo íntimo, muy cercano; aunque ahora el hijo Carlos Salinas lo niegue. Por cierto, ¿en dónde cree usted que fue detenido Raniere, acusado de tráfico sexual y trabajo forzado (esclavismo)? Pues en el país de su querido amigo Emiliano Salinas, en México.
Pero de lo que se trata en este momento es de congratularse con las segundas nupcias del cachorro más joven de Salinas de Gortari, quien por cierto nunca se interesó en seguir una carrera política como su padre. En caso de que lo hubiera hecho, la sombra de su padre le habría pesado toneladas.